En días recientes inició operaciones el Marketgreen-LAB, una nueva área de la empresa dedicada a la Investigación y Desarrollo (I+D), que tiene como objetivo principal generar nuevas soluciones para la gestión de residuos cuyo origen son las acciones de Marketing de las empresas, básicamente materiales que hasta hoy día no cuentan con una opción de recuperación, reciclaje, reutilización o incluso reemplazo.
La nueva iniciativa de Marketgreen es posible gracias al financiamiento de la Corporación de Fomento de la Producción, Corfo, luego de resultar ganadores -en diciembre pasado- del primer fondo de Economía Circular entregado por esta instancia.
Como parte del proyecto que apoya Corfo –explica Nicolás Calvo, sub-gerente de Innovación y Desarrollo- los últimos tres meses nos hemos dedicado a desarrollar un prototipo de un producto nuevo con tela PVC que anteriormente fue utilizada para avisos publicitarios de vía pública. “Estamos revalorizando la basura, transformándola en un insumo sustentable, de alta calidad y durabilidad, para el sector construcción”, destaca.
En este tiempo el equipo de Marketgreen realizó la validación del nuevo producto, en cuanto a su proceso de producción, comparación con otros sustitutos, resistencia, tracción y desgaste. El paso siguiente es el diseño de la maquinaria que servirá para la producción en serie del nuevo material que sin duda aumentará la capacidad actual de transformar tela PVC, material que es desechado en grandes cantidades tanto en Chile como el resto del mundo, y cuyo proceso de reciclaje se realiza solo en Italia y a un alto costo.
Innovación Colaborativa
El Marketgreen-LAB se instaló en el FabLab de la Universidad de Chile, un espacio de fabricación digital, donde convergen proyectos locales realizados por equipos multidisciplinarios y de diversas nacionalidades, en su mayoría con un impacto ambiental o social. Este espacio de investigación e innovación ha nutrido la iniciativa así como experiencia del equipo, como relata León Quesney, diseñador.
“Formar parte de un entorno donde a cada instante se está creando, experimentando y colaborando -dentro del mundo de la Ciencia y Academia- nos ha permitido obtener aportes valiosos de otras personas. Aquí llega mucha gente de diferentes áreas, no solo de los proyectos que estamos instalados; todos los días nos visitan estudiantes y profesores de disciplinas diversas, hacen preguntas, se interesan por el proyecto, aportan y sugieren. Hay una colaboración natural, muy auténtica y positiva, para lo que hacemos”, cuenta.